La empresa solicitó la cancelación de contratos laborales el pasado 31 de diciembre, del 2020, en las oficinas del Ministerio del Trabajo de Carazo, pues argumentaban que había poca demanda de productos que elaboran debido a la pandemia y que estaban en bancarrota. Dicha cancelación se hizo efectiva el pasado 5 de enero y la mayor preocupación de los trabajadores era precisamente la cancelación de sus pagos.
Por varios días un grupo de ex operarios se presentaron en las afueras de las instalaciones de la maquila reclamando lo que por derecho les corresponde.
El pasado lunes 12 de enero los sindicatos de trabajadores, el representante de BWA y otras marcas involucradas, así como el Ministerio del Trabajo (Mitrab) llegaron a un acuerdo luego de una intensa negociación que duró 15 días, según un comunicado emitido por la cartera estatal.
Dicho acuerdo establecía que se debía liquidar el pasivo laboral de los trabajadores, pero además se pactó que del total de los que perdieron sus plazas, 1,130 serían recontratados de inmediato por la empresa que adquirirá los activos de BWA.
.“Lo que ha estado pasando es que los ex dueños de esa empresa ya no están en Nicaragua, hay otra administración en la planta, pero también los anteriores socios se encuentran en un proceso de juicio, de tal manera que esta situación ha impedido el cumplimiento del pago de las liquidaciones, pero ya el Mitrab puso un plazo para que cumplan,” informó Miguel Ruiz, dirigente sindical de la Coordinadora Regional de Sindicatos de Maquila (CRSM).
De acuerdo con Ruiz, la planta debió de cancelar a más tardar la primera quincena de febrero más de 1 millón de dólares en concepto de liquidación, pero el pago solo lo han recibido 1,053 trabajadores, en su mayoría mujeres.
“De momento se han liquidado a 1,053 personas, bajo el método del 70% efectivo y el restante en prendas de vestir, pero hace falta casi la mitad por ser liquidados'', reconoció el defensor de los derechos de los trabajadores.
El plazo establecido para el pago de la liquidación, es de al menos 30 días como máximo, detalló el sindicalista.
BWA es una zona franca de capital estadounidense y tiene su planta sede en El Salvador. Fue inaugurada en el país el 19 de octubre de 2017 por el delegado presidencial para las inversiones del actual Gobierno.