Cabe resaltar que el tope de los niños se realiza todos los 18 de enero, en horas de la noche, sin embargo, este año sus impulsores decidieron trasladarlo para esta fecha, lo que facilitó que gran parte del pueblo se volcara a dicha actividad, sin importar el rebrote de coronavirus que según médicos se está viviendo en el país.
Asimismo, es importante recalcar que a la hora de la eucaristía, que se celebró a las 9 de la mañana, se restringió el número de fieles que pudieron ingresar al templo, a quienes les pidieron el uso de mascarilla, les aplicaron alcohol y mantuvieron la distancia social, sin embargo, las personas que no pudieron ingresar a la iglesia se quedaron en el atrio esperando a que concluyera la celebración.
Si bien la mayoría de actividades transcurrieron en total calma, se produjo un incidente que no pasó a más, cuando un grupo de señoras bastante mayores exigía que les abrieran las puertas para ingresar a la iglesia, pese a que el agente policial que estaba en el puesto les explicó que podrían entrarr cuando las personas que estaban adentro abandonarán el templo. Las mujeres molestan aseguraban que el sacerdote no tenía miedo de que el pueblo sacara las imágenes.
Bailes
Para sorpresa del pueblo católico diriambino, antes de la misa hicieron su entrada las imágenes de Santiago y San Marcos, con sus respectivos cabildos, para acompañar a San Sebastián en las fiestas patronales que este año se celebran de una manera diferente por el contexto del covid-19.
Resulta llamativoel hecho de que tres grupos del baile del toro huaco sólo uno hizo presencia no obstante en el caso del viejo y la vieja las cosas fueron lo contrario, pues había mucho más promesantes que de costumbre. También desfilaron el Güegüense, el gigante y las inditas aparecidas.
Para mañana, que es el propio día de San Sebastián, se espera la llegada de más promesantes y la iglesia ya ha dado conocer el protocolo que utilizarán para evitar mayores aglomeraciones de personas.