El último deseo del reconocido jinotepino, quien procreó 16 hijos, se cumplió, porque antes de su fallecimiento él había solicitado que su ataúd fuera transportado por una carreta y no le llevaran en un carro fúnebre, como suele suceder en la mayoría de casos.
Varios caballos acompañaron hasta su última morada a Rojas, porque se sabía que entre sus más grandes pasiones se encontraba esa especie de animal, incluso dicho aspecto se evidenció en su ataúd, el cual el dio a hacer personalizado y tiene plasmado una cruz y un equino enmarcado con una herradura.
Un personaje muy querido en Jinotepe
"Don Agustín es un icono para nosotros, él era fraterno, el se merece una gran despedida"refirió un miembro de la Caballería San Miguel
Don agustín era muy alegre, era un hombre caritativo a él le encantaba ayudar"mencionó uno de los presentes en el entierro del jinotepino.
La muerte de Rojas se conoció en horas de la tarde del pasado 26 de octubre , a través de las redes sociales.
De acuerdo con la información de Mundo de Noticias, plataforma informativa del comunicador Alberto Cano, el señor Rojas se rindió ante la muerte en su finca, ubicada en Santa Rosa, Santa Teresa.
"Hace pocos minutos en su finca, Santa Rosa, en Santa Teresa, tal como fue su último deseo, murió el insigne ciudadano jinotepino, don Juan Agustín Rojas", indica la publicación de Facebook de Mundo de Noticias.
A la vez, en la nota resalta que Rojas era un gran devoto de Santiago Apóstol, solía participar en los desfiles hípicos de la ciudad y además era el fundador del reconocido negocio familiar de venta de madera.
"Muy reconocido por sus trabajos de campo, la devoción a Santiago Apóstol, como impulsor de la venta de madera, su destacada participación en los desfiles hípicos, pero ante todo por haber constituido una familia admirada y respetada", agrega el escrito.