Según la información de medios afines al gobierno, el primer caso se reportó en el barrio José Antonio Sánchez Salazar, ubicado cerca del Hospital Regional Santiago, de Jinotepe.
El afectado, según el reporte, se encontraba jugando fútbol, cuando regresó a su hogar, se dio cuenta de que forzaron la entrada y se habían llevado una licuadora, un celular y 3500 córdobas. Aún se desconoce cuántas personas entraron a su casa para efectuar el crimen.
Por otro lado, en la ciudad de Diriamba, específicamente en el barrio San Miguel de Guayacán, la joven de 26 años, María Hernández Aguilar, reportó que le robaron 800 córdobas y un celular, cuyo precia ronda los 1500 córdobas.
Ella mencionó rasgos físicos del hombre que la interceptó mientras caminaba: es de tez blanca, alto y delgado.
Otro robo en San Marcos
Por otro lado, amarrados de pies y manos, así dejaron delincuentes al guarda de seguridad Marvin Antonio Aguirre Bermúdez, de 21 años, para robar todo lo que se encontraba en la finca que cuidaba, en el municipio de San Marcos, departamento de Carazo
Marvin Antonio comentó a agentes policiales que entre varios sujetos lo amarraron y posteriormente procedieron a quitarle su arma, la que era utilizada para cuidar la finca, para después robar todos los objetos de valor que encontraron a su paso.
Entre los artículos robados están un equipo de sonido, un DVD, dos baterías de motocicletas, 2 mil córdobas en efectivo y 2 quintales de frijoles, todo valorado en más de unos 20 mil córdobas.
Los agentes policiales de Carazo están realizando las investigaciones pertinentes para dar con el paradero de los delincuentes y que paguen por el delito cometido.
Según el monitoreo del Observatorio Nicaragüense de la Violencia, el incremento en el número de asaltos a mano armada y de robos en establecimientos comerciales se ha dado en todo el territorio nacional, una situación que no resulta extraña, porque en 2019 Nicaragua registra un incremento de entre el doble y el triple en la violencia e inseguridad ciudadana.