El doctor Rojas batalló contra el Covid-19 desde el 31 de julio, cuando comenzó a presentar síntomas asociados al virus, sin embargo, se complicó el pasado 10 de agosto, debido a otras afectaciones que padecía, como hipertensión y diabetes.
"Él estaba bien, empezó a sentirse cansado, él es hipertenso, diabético y tiene cardiopatía", señaló uno de sus hijos en su momento.
Al ver que su salud empeoraba, su familia decidió llevarlo al Hospital Regional Santiago, de Jinotepe, donde durante muchos años sirvió a la población del departamento.
Sin embargo, sus colegas determinaron que ameritaba ser trasladado al hospital capitalino Fernando Vélez Paiz, donde luchó como el guerrero que era, pero finalmente perdió la batalla contra el Covid-19.
Pacientes agradecidos
Desde que se dio a conocer que el doctor estaba delicado de salud, sus amigos y sus pacientes empezaron a demostrar en redes sociales la admiración que sentían por él y todos manifestaban que estaban orando por su pronta recuperación.
Uno de los pacientes que le envió mensajes de ánimo al doctor Rojas es el futbolista mexicano Bernardo Gradilla, quien se desempeñó como portero del Cacique Diriangén y durante su estancia en el team diriambino lo diagnosticaron con cáncer.
“Qué tal mi querido doctorazo, quiero que sepa que lo admiro mucho por tan buen médico que es, espero que este malestar pase rápido y estoy orando por usted, le mando un gran abrazo desde Guadalajara México, estoy con usted y ánimo”, escribió Gradilla.
El futbolista, en enero de 2020, agradeció al doctor Rojas porque lo operó y prácticamente se convirtió en pilar fundamental para que lograra vencer el cáncer.
Al conocer la noticia del deceso del doctor, Gradilla publicó una foto a su lado con el siguiente texto: “Noticias que parten el alma. Descansa en paz mi querido doctor, hasta el cielo te mando un abrazo, el legado que dejaste en la medicina es memorable, pronta resignación y mucha fuerza a su familia, bendiciones y abrazo grande”.
Pacientes de muchos años también manifestaron por medio de Stereo Romance el agradecimiento que sentían por el médico, a quien recuerdan como bromista y sobre todo muy humano, pues siempre estaba preocupado por el bienestar de sus pacientes.