Quintero hace tres años comenzó a dedicarse al cultivo de maíz y frijoles, dos de los principales alimentos de la gastronomía del buen nicaragüense, y este visualiza buenas cosechas en temporada de postrera.
Quintero mostró su optimismo porque asegura que las lluvias han sido bastante regulares, después que hubo más de dos años de sequías continuas y pérdidas irreparables, hoy asegura que habrá buena producción.
Este, además, siembra tomates, chiltomas y pepinos, de los que gran parte lo comercializa en el mercado Jorge Matus Téllez, de Jinotepe, y otros los utiliza para la alimentación cotidiana de sus cuatro hijas, cuatro nietos y su esposa.
Cuidados
El cultivo de los tomates es importante para este campesino, quien tiene que acompañar de un control minucioso el cultivo. Desde que siembra la semilla de tomate se esperan tres meses para que dé el fruto, durante este tiempo lleva mucho cuido de plagas y limpieza en los alrededores.
Rufino Quintero ha sabido aprovechar las herencias inmateriales, es decir, los principios y valores vinculados a la agricultura que dejaron nuestros ancestros y que hoy les generan el pan de cada día en su hogar.
Este hombre vigoroso que inicia su faena desde antes que salga el sol, cultiva tres manzanas de tierra, entre maíz, frijoles, tomates, chiltomas y pepino, en el municipio de La Pita, que se ubica la comunidad Román Esteban, de Jinotepe-Carazo.
